Gracias al desarrollo de la genética, el valor de las semillas aumenta constantemente, lo que exige una mayor protección e incentiva a los agricultores a preocuparse por el éxito de sus siembras.
Hoy en día, existen nuevas tecnologías en las sembradoras que permiten
– Mayor velocidad
– Precisión de la singulación
– Control y seguimiento de las operaciones en pantalla en tiempo real